Después de los 60 años las actividades físicas, recreativas y lúdicas cobran mayor importancia en el mantenimiento del estado de la salud física y cognitiva. Implementar un plan de actividades para adultos mayores que intercale la diversión y el ejercicio es la clave para conseguir una vejez activa y ayudar a prevenir complicaciones de salud, además de ofrecer una gran variedad de beneficios, dependiendo el tipo de actividad que se practique.
Las actividades lúdicas son un aliado sumamente efectivo para estimular la actividad cognitiva en los adultos mayores, ya que no solo representa una forma de abordar la cotidianidad, sino que es una actividad que se disfruta. Estas actividades no solo contribuyen al desarrollo de habilidades, sino también fortalecen las relaciones interpersonales y fomentan el sentido del humor. Lo mismo sucede con las actividades recreativas que, si bien no están tan enfocadas en el aprendizaje, buscan crear momentos agradables que mejoren la sensación de bienestar. (Lizano Salazar, 2014).
Ejemplos de actividades lúdicas
Las actividades lúdicas por excelencia son los juegos de mesa, ya que estos fomentan y mantienen la agilidad mental y el pensamiento crítico en los adultos mayores. Además de no requerir de la realización de muchos movimientos, ya que la mayoría se pueden jugar sentados.
Los juegos más conocidos y que ofrecen mayores beneficios son: parqués, dominó, monopolio, póker, scrabble, bingo, ajedrez, lotería, damas chinas, crucigramas, rompecabezas y torres de equilibrio. (Martínez, E. 2022).
Beneficios de las actividades lúdicas y recreativas
Cabe mencionar, que los beneficios no solo se limitan a ejercitar la función analítica y cognitiva, sino que también tienen un impacto importante en el estado emocional y psicosocial de las personas mayores, como, por ejemplo:
- Disminuir los sentimientos de soledad.
- Aumentar la creatividad y las capacidades artísticas.
- Mejorar el estado de ánimo y la motivación.
- Favorecer el mantenimiento de un funcionamiento psicomotriz adecuado.
- Incrementar los niveles de autoestima.
- Fomentar los contactos interpersonales y la integración social.
- Mantener, en cierto nivel, las capacidades productivas.
- Generar niveles más bajos de depresión.
- Ayudar a mantener el equilibrio, flexibilidad y expresividad corporal.
- Fomentar la creatividad y productividad en el uso del tiempo libre.
- Facilitar la adaptación al entorno.
Actividades para adultos mayores: Más allá de la recreación
Las actividades para adultos mayores no solo están enfocadas en el disfrute y el aprendizaje, también pueden aportar a mantener un estado físico óptimo durante la vejez. Algunas de las actividades que pueden realizar en estos casos son:
- Caminar: Las caminatas contribuyen a la circulación y pueden mejorar el estado de ánimo, además de mantener el estado óptimo de la musculatura de las piernas y mejorar el equilibrio.
- Andar en bicicleta: Representa uno de los mejores ejercicios para mejorar la salud cardiovascular, al igual que contribuye a mejorar la técnica de respiración.
- Bailar: Esta es una actividad que puede realizarse en entornos cerrados y abiertos, contribuye al bienestar emocional y libera en el cerebro sustancias químicas asociadas a la felicidad.
- Yoga: Esta actividad que involucra tanto la mente como el cuerpo por lo general fusiona posiciones físicas, técnicas de respiración y métodos de relajación.
- Natación: Este ejercicio ayuda a mejorar la coordinación, reduce el estrés y estimula la flexibilidad en los adultos mayores.
En conclusión, establecer un plan que incluya actividades físicas, recreativas y lúdicas es fundamental para encaminarse hacia el envejecimiento activo. Una etapa de vida saludable en la que también se disfrute la realización de diferentes ejercicios que contribuyan al bienestar tanto físico como psicológico y emocional.